Samhain, Halloween, Sou'en, So-wen... Misma fiesta, distintos nombres. Pero lo importante es, que tanto para los paganos como para los profanos, es el día en el que el plano espiritual y el físico están indiscutiblemente unidos. Las Almas de aquellos que han partido vuelven a la tierra y caminan entre nosotros. Algunos lo celebran vistiéndose de personajes de terror y yéndose de fiesta poseídos por el ritmo ragatanga; o llamando a las casas por gominolas y caramelos. Otros, simplemente nos reunimos en familia y hacemos un ritual o celebración pagana.
Sea cual sea tu forma de celebrar el año nuevo celta, ten presente que éste es el fin de un ciclo y el inicio de uno nuevo, un momento para reflexionar sobre lo aprendido, valorar nuestras experiencias y dejar atrás nuestras debilidades y malas pasadas.